La construcción es uno de los sectores con menor participación femenina y de diversidades. Con nuevas tecnologías y cursos de capacitación, diversas iniciativas promueven mayor equilibrio de género.
Fuente: Otra Economía
En el mundo, menos de 11% de quienes trabajan en actividades de Construcción son mujeres; y en Argentina ese porcentaje ronda el 5% según datos de la Fundación Vamos a Zoomar. No obstante, en los últimos años diversas iniciativas vienen promoviendo una mayor participación femenina y de las diversidades en este sector.
Sandra del Valle Bulacio es profesora de nivel Secundario y fundadora de Mujeres con Oficios, un espacio de promoción de inserción laboral y capacitación gratuita para mujeres en áreas como albañilería y construcción en seco.
Todo comenzó a fines de 2019, cuando Sandra necesitaba arreglar unos muebles en su casa, en la localidad cordobesa de San Francisco, y decidió poner un aviso en Facebook pidiendo preferentemente carpinteras. Varias mujeres contestaron el aviso, y muchas más solicitando presupuestos para distintos arreglos.
Así nació Mujeres con Oficios, como un grupo de intercambio que fue creciendo hacia un espacio de capacitación en temas de albañilería, electricidad, pintura y arreglos en general. “En el grupo me dí cuenta que había mucho interés y necesidad de formarnos en oficios que eran considerados masculinos”, cuenta Sandra. Este fue el puntapié para arrancar una serie de talleres que -por la irrupción de la pandemia de Covid-19-, en 2020 fueron virtuales, pero a partir de 2021 comenzaron a realizarse en forma presencial y tuvieron más de 300 asistentes.
“Saber realizar trabajos de electricidad, albañilería, pintura o porcelanato permite generar ingresos mucho mayores a los que se obtienen con las tradicionales tareas de limpieza y cuidado”, dice la fundadora de Mujeres con Oficios que por esta iniciativa, resultó ganadora del Premio “Mujeres que inspiran en la construcción” 2024, otorgado por la firma Holcim.
En este espacio, además de los talleres y capacitaciones, se brinda contención y asesoramiento en otras temáticas como la violencia económica y de género. “Poder construir o refaccionar tu casa y no depender de otros para hacerlo, de alguna forma te empodera y te permite salir de situaciones tóxicas o de dependencia”, afirma Sandra, en base a su propia experiencia.
“Tenemos una huerta y un lavadero de autos. Contamos con una bolsa de trabajo y hacemos convenios con municipios y empresas para que tomen más mujeres”, enumera. Mensualmente, se organiza un ciclo de cine-debate, para discutir temas como la co-responsabilidad en las tareas domésticas y de cuidado. “Vienen mujeres de todas las edades y niveles educativos. Algunas lo hacen buscando una salida laboral; otras para arreglar sus propias casas y luego ven que también pueden obtener un ingreso”, destaca la emprendedora.
Mujeres organizadas
Al igual que “Mujeres con Oficios”, Las Omas (Organización Mujeres Argentinas Solidarias) llevan adelante iniciativas de capacitación en oficios y en temas como salud sexual y violencia de género. Surgida en 2011 en la provincia de Córdoba, esta organización realiza junto al CEVE (Centro Experimental de la Vivienda Económica, del Conicet) y la Asociación Vivienda Económica (AVE), talleres de técnicas constructivas como el “Beno” un sistema basado en placas prefabricadas que se montan en obra y resultan más livianas y fáciles de manipular que los materiales constructivos convencionales.
Con este sistema, las Omas edificaron su propia sede social, y se organizaron en distintas cooperativas y cuadrillas femeninas para la auto-construcción de viviendas.
La organización también trabaja junto a la empresa social 3C Construcciones, en la capacitación y utilización de materiales sustentables como los bloques de plástico reciclado. Además de ser más livianos y económicos, estos eco-ladrillos demostraron tener una excelente aislación térmica y son usados no solamente en las llamadas “viviendas sociales”, sino también en construcciones para countries y casas de fin de semana, con lo cual brindan una salida laboral para cooperativas y cuadrillas de mujeres constructoras.
Construir equidad
Los cambios en los sistemas constructivos y el desarrollo de materiales más livianos favorecen la participación femenina en la industria de la construcción. Y “su incorporación genera a su vez cambios positivos en todo el equipo”, afirma la arquitecta Carolina Carvalho, directora del programa Mujeres que Construyen en la Fundación Vamos a Zoomar.
“Cuando hay mujeres en la obra, las condiciones de trabajo mejoran. Son ellas las primeras en exigir baños limpios; platos y cubiertos para el almuerzo y otras condiciones laborales básicas que luego se trasladan a todos los trabajadores”, destaca Carvalho.
La Fundación surgió en 2008, organizando charlas motivacionales para recaudar fondos destinados a distintas causas socio-ambientales. Varios de sus patrocinadores eran empresas de la construcción, y una problemática compartida era la falta de equidad de género en el sector. A partir de esto, en 2015 se creó el programa “Mujeres que Construyen”, basado en tres ejes: Capacitación, Empleabilidad y Concientización.
En el primero de los ejes, junto a la escuela de oficios de la Universidad Nacional del Nordeste, se realizan certificaciones universitarias gratuitas de auxiliar en construcción en seco. Además de las cuestiones técnicas, se brinda capacitación sobre cómo conformar una cooperativa o microempresa, cómo hacer presupuestos, presentar un curriculum o manejar las redes sociales.
En cuanto a la empleabilidad, se generan convenios con distintos municipios y empresas, para incorporar y contratar a mujeres y diversidades en las obras. Y finalmente, la concientización es un pilar que atraviesa a todos los demás. “Para que haya una verdadera equidad de género en el mundo de la construcción, hace falta derribar muchas barreras físicas y mentales”, dice Carvalho.
Hoy son numerosas las empresas del rubro que han asumido metas de equidad de género. La firma Holcim, productora de materiales de la construcción con 1400 empleados en Argentina, adhirió a los principios de empoderamiento de las Mujeres de la ONU, y entre 2021 y la actualidad, incrementó la participación femenina en la compañía del 10 al 19%. “Además, hoy en día más del 40% de mujeres en Holcim se encuentran en posiciones de liderazgo y el 48% de las contrataciones totales del último año fueron mujeres”, señala Sol Arce, Directora de Recursos Humanos de la compañía.
Como en casi todas las áreas de actividad, el avance de las mujeres ha sido importante en la industria de la construcción, pero aún queda mucho por recorrer.